Hallux Rigidus, diagnóstico y tratamiento

El hallux rigidus es una patología que impide la dorsiflexión de la articulación del hallux o dedo gordo del pie. Se caracteriza por una artrosis osteofítica, degenerativa y anquilosante de la primera articulación metatarso-falángica. El Hallux Rigidus es una de los problemas más frecuentes del primer dedo.

Hasta la consulta de Podoactiva llegó una paciente con dolor intenso al intentar mover la articulación del dedo, por lo que para caminar debía realizar mayor trabajo con otras articulaciones como la rodilla y cadera.

Este tipo de sintomatología se manifiesta como una deformidad abultada en la zona del primer metatarsiano. Habitualmente, este tipo de deformidad tiende a confundirse con el famoso “juanete”, por su parecido anatómico.

Sin embargo, se trata de un Hallux Rígidus, que viene a significar “primer dedo rígido”.
Debido a cambios estructurales y a la pérdida del cartílago, se produce una disminución progresiva de la movilidad en la primera articulación metatarsofalángica, que va generando rigidez de una forma progresiva.

En estadios avanzados, a la hora de caminar, no se puede ejecutar el paso correctamente limitando la fase en la que el pie despega del suelo (3º rocker o balancín del pie).

Una de los tratamientos para esta patología es la intervención quirúrgica para mejorar la movilidad de la articulación, pero nuestra paciente refiere evitar la operación. De esta manera, se realizan unas plantillas personalizadas que alivien la sintomatología.