Blog de Podoactiva

Las plantillas personalizadas pueden mejorar la calidad de vida de las personas mayores



Cada uno de nuestros pies tiene 28 huesos, 33 articulaciones y más de 100 tendones. Este complejo “puzzle” es una estructura arquitectónica realmente compleja que nos permite mantenernos de pie y desplazarnos durante toda nuestra vida.

Cada uno de nuestros pies tiene 28 huesos, 33 articulaciones y más de 100 tendones. Este complejo “puzzle” es una estructura arquitectónica realmente compleja que nos permite mantenernos de pie y desplazarnos durante toda nuestra vida.

Una persona normal a lo largo de su vida va a dar los pasos suficientes como para dar entre dos y tres vueltas al mundo andando. En cada paso cargamos en el pie de apoyo el doble de nuestro peso. Esto nos da la idea de lo perfectamente ideado que está para soportar un nivel de carga intensísimo y “quejarse” poco.

En realidad no solemos prestar demasiada atención a nuestros pies. Además durante la mayor parte del tiempo los mantenemos encerrados en el interior de un zapato que a veces no está pensado para nuestro tipo de pie. Posiblemente la primera medida importante para cuidar nuestros pies sea elegir un calzado correcto y que esté pensado para la actividad que vamos a realizar. Para una persona mayor, lo ideal sería usar un zapato con una horma suficientemente ancha para que el pie no esté oprimido y no se generen roces, una suela que amortigüe el impacto (mucho mejor usar una suela de goma que una de piel), un tacón prudente y estable (no más de 3 cm en mujer) y que esté fabricado en materiales que permitan la transpiración del pie.

Las plantillas personalizadas para personas mayores pueden mejorar su calidad de vida enormemente

El pie de una persona mayor puede presentar multitud de “pequeños problemas” que contribuyan a disminuir la calidad de vida y a veces limiten la actividad física, tan necesaria para todas las personas. La mayoría de estos problemas se pueden solucionar de una manera fácil acudiendo al podólogo regularmente.

Hoy en día contamos con tecnología que nos permite poder analizar la forma de pisar de una persona con mucha precisión y poder relacionar una patología actual o futura con la misma. Hay muchas lesiones que están directamente relacionadas a una forma de pisar defectuosa (metatarsalgias, espolones calcáneos, esguinces de repetición, etc.) y que pueden solucionarse de una forma muy efectiva diseñando y fabricando una plantilla personalizada.

En muchos casos nos encontramos con personas mayores que piensan que una plantilla es algo que puede estar indicado en niños o jóvenes pero que no es un producto dirigido para ellos. Nada más lejos de la realidad, de la misma manera que al cumplir años nuestra vista puede verse afectada y consideramos totalmente normal tener que usar unas gafas graduadas, nuestros pies también pueden ver afectadis y necesitar unas plantillas personalizadas. Una plantilla personalizada correcta puede ayudar a compensar y corregir los problemas que el paso del tiempo ha causado en nuestros pies (pérdida de tejido adiposo, modificaciones de la alineación del pie, pérdida de fuerza y estabilidad, etc.) Incluso una plantilla puede ayudar en otras partes del cuerpo como las rodillas o la columna.

 

La actividad física moderada en personas mayores es muy recomendable

Caminar es el mejor ejercicio que podemos recomendar para cualquier persona. Además de mejorar factores metabólicos como la glucosa o el colesterol, también tiene una importancia directa en nuestro sistema circulatorio ya que el gesto de caminar facilita que nuestra sangre “retorne” desde nuestros pies hasta el corazón.

Por estos y otros muchos motivos es muy importante que prestemos una atención suficiente a nuestros pies, acudiendo regularmente al podólogo. Sólo tenemos dos pies para toda una vida. Tenemos que cuidarlos.

Artículos Relacionados

Comentarios

Post A Comment