Calzado de primavera. 5 claves para elegir los zapatos correctos para esta estación

12 Abr 2022

Las lluvias y las suaves temperaturas tan características de la primavera marcan el cambio de calzado tras los meses fríos del invierno. Con el buen tiempo comenzamos a ver zapatos más abiertos o con tejidos finos, por ello es muy importante saber qué calzado utilizar en esta estación para cuidar la salud de nuestros pies.

 

¿Cómo escojo el calzado de primavera para evitar problemas en los pies?

 

 

5 CLAVES PARA ELEGIR EL CALZADO DE PRIMAVERA

 

1. SUJECIÓN PARA EVITAR LESIONES EN LA PIEL

 

Llevar un zapato sujeto a nuestro pie (sin presionarnos o comprimirnos en exceso) es esencial para evitar la aparición de ampollas o rozaduras. ¿Cómo lograrlo? Te recomendamos utilizar calcetines o medias que se ajusten perfectamente a nuestra talla, además de un calzado acordonado que nos sujete el pie para evitar los problemas expuestos.

 

Un calzado sujeto nos ayudará a no torcernos el pie o el tobillo, ganando estabilidad.

 

 

2. MATERIALES TRANSPIRABLES PARA EVITAR UNA SUDORACIÓN EXCESIVA

 

Suben las temperaturas y es fundamental apostar por un calzado transpirable, ya que los pies también sudan (¡y mucho!). Es muy importante que los zapatos estén fabricados con materiales de calidad, alejándonos de materiales más “plásticos” que no ayudan a transpirar.

 

Para evitar un sudor excesivo o que nuestro sudor se concentre dentro del calzado, los materiales serán clave.

 

Cabe comentar que será frecuente la aparición de hongos u otras patologías como el pie de atleta en esta época del año si no tratamos el tema de la sudoración con la importancia que se merece.

 

Nuestro consejo es que escojas un buen calzado, pero también utilizar talco para tratar de impedir que aparezcan bacterias y hongos.

 

 

3. APUESTA POR UNA SUELA ANTIDESLIZANTE

 

La lluvia toma protagonismo en primavera y será frecuente encontrarnos suelos mojados y resbaladizos. Por ello, es importante que la suela de nuestros zapatos sea antideslizante.

 

La suela antideslizante nos permitirá evitar caídas, ya no solo a la hora de caminar o ir a la montaña, donde es fundamental, sino también en el día a día.

 

Pero, ¿cómo debe ser una suela para no resbalarnos? ¡Muy fácil! Tiene que tener cierto grosor y que sea de goma, ya que se reparten mejor las cargas en los pies dándonos mayor estabilidad.

 

 

4. UN CALZADO FLEXIBLE MARCA LA DIFERENCIA

 

El pie debe sentirse cómodo dentro de nuestro zapato, sobre todo, si caminamos muchas horas al día o trabajamos de pie o en movimiento. Para lograrlo, tenemos que optar por un calzado cuya parte delantera sea flexible, así conseguimos que el pie pueda realizar determinados movimientos al caminar que nos ayudan a evitar sobrecargas u otras lesiones.

 

Escoger un zapato rígido provocará lesiones en la piel, un cansancio excesivo en nuestros pies y un desgaste de energía a nivel general.

 

 

5. PLANTILLAS PERSONALIZADAS PARA ACOMPAÑAR TUS PASOS

 

Desde Podoactiva, recomendamos que el zapato o zapatilla que elijas tenga unas plantillas extraíbles. De esta manera, si un/a podólogo/a lo ha determinado en consulta tras un estudio biomecánico, se podrán sustituir por unas plantillas personalizadas que te ayudarán a repartir las cargas, prevenir o corregir patologías en tu pisada, además de evitar lesiones a corto y medio plazo.

 

Conocer tu forma de pisar y tus pies es clave para cuidar tu salud.

 

 

En definitiva, hay que escoger el calzado de manera correcta y visitar al podólogo en los cambios de estación atendiendo a sus consejos para lograr disfrutar de la primavera con unos pies sanos y cuidados.

 

En Podoactiva podemos ayudarte a elegir el calzado más adecuado para ti. Consulta tu clínica Podoactiva más cercana AQUÍ o contáctanos en el 974 231 280 o a través de info@podoactiva.com.